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Amor a tus espaldas (Sonamy) Capitulo 51

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Published: Sep 20, 2014

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•A los segundos, alzo la mirada esperando que sea Sonic, no tenía ganas de levantarse, quería que él lo haga pero la sorpresa fue que no era él, ¿quién era? Sí. La persona que la había abandonado por más de un mes estaba enfrente suyo mientras ella tenía una crisis emocional, no quería verla, no quería saber nada de ella, mucho menos ahora, sí, era su madre. Estúpida, vacía, fría, vanidosa, plástica y perfectamente vestida como siempre. Pasaba por el jardín y la miraba con cara de bicho raro. Sin el más mínimo interés en las lágrimas instaladas en sus ojos, le dijo: “Levántate de ahí niña y ven a la casa, ayúdame a desempacar, ¿qué haces que no estás en el colegio?” Solo asintió y le explico lo del baile, tratando de que no se note su voz quebrada. Mientras desarmaba la maleta de su madre y veía los grandes y costosos atuendos que se había comprado en su tiempo de viaje, pregunto por su padre. Lo necesitaba, necesitabas de sus: “Te extrañe mi vida, ven y dale un abrazo a este viejo” mientras ella corría muy feliz hacía él. Solo le supo decir que seguiría trabajando otro par de horas. De la manera más fría del mundo. Termino con su equipaje y se acerco a su habitación, entro y se tumbo en su cama con la gran caja que contenía el vestido a su lado. El tiempo pasaba volando, ya eran las 6 en punto y aún no estaba lista. El baile empezaba en 2 horas, dos cortas y tristes horas. Alisto todo lo necesario en su cama. Mientras lo hacía lloraba demasiado, extrañando a Sonic, recordándolo. Puso el perfume que él le regalo sobre el vestido que usaría en una cita con Shadow. Perfecto, irónico. Una forma más de matarse lentamente. Estaba a punto de meterse a la ducha cuando la puerta de su casa sonó y oyó la voz de su padre decir: “Hogar, dulce hogar”. No contuvo las ganas de bajar corriendo a abrazarlo. Las lágrimas de tristeza se convirtieron en unas de alegría, se lanzo encima de él y lo beso tantas veces como pudo, al bajarse de él, pudo percatarse de la gran sonrisa que tenía en los labios, pero se veía cansado, su mirada se veía mal… como si le pasara algo. Se acomodo delante de él y dijo...•

Amy: Papá, te extrañe demasiado *llorando*

Padre: Mi princesa, yo también te extrañe demasiado, no sabes cuánto quería uno de tus abrazos. *Jugando con su cabello y limpiando sus lágrimas*

Amy: Pues ahora puedes tener todos los que quieras *abrazándolo*

Padre: ¿Qué te pasa mi nena? ¿Por qué lloras?

Amy: Es porque te extrañaba.

Padre: A mí no me mientas mi vida, no puedes extrañar tanto a este viejo *sonrisa cálida* aparte, tus ojos están hinchados, vienes llorando desde hace un buen tiempo. *mirándola fijamente*

Amy: Vamos a la sala pa, necesitamos pasar un tiempo juntos *dijo jalándolo*

•Mientras caminaban a la sala, las lágrimas no paraban de salir, ¿Sonic? ¿Quién era él? Su padre era el hombre más importante en su vida (no estoy de acuerdo...), la conocía tan perfectamente que podría jurar que hasta la conocía mejor que ella misma, tenía ganas de contarle todo lo que paso pero sabía que no podía, no iba a cargarlo con sus problemas. Solo se sentó a su lado a oírlo hablar de todo lo que hizo en su viaje. Wow, como amaba a ese hombre y a su forma de relatar, su voz ronca y sus arrugas en los ojos. Sí. Su padre era un señor de edad, pero no le importaba, era lo único bueno que tuvo toda su vida, su madre nunca fue tan afectuosa o preocupada. Cuando él terminó su relato le preguntó que de nuevo había pasado en su vida y solo respondio...•

Amy: ¿La verdad? Nada interesante, papi, no pinto hace mucho y hoy es el gran baile de mi colegio *mirando el reloj* es en una hora o una hora y media si tengo suerte *sonriendo*

Padre: ¿Y mi nena tiene cita? Ay, no sé ni para que pregunto, eres la chica más hermosa que he visto en toda mi vida, claro que tendrás una *tocando la punta de su nariz*

Amy: En realidad sí, voy con Shadow Robotnik, es el nuevo capitán del equipo de soccer.

Padre: ¿Capitán? ¿Hay algo de lo que deba preocuparme? Amy, mi amor, ellos siempre tienen a más de una.

Amy: No papá, el es distinto, hemos estado saliendo por un tiempo.

Padre: ¿En serio? ¿Por qué no me contaste? Siento que me abandonas *fingiendo tristeza*

Amy: Papá, te llame millones de veces y no me respondías *haciendo puchero*

Padre: Lo lamento princesa, estaba muy ocupado *Abrazándola* Vamos ya, ve a ponerte hermosa para el baile. Mi hermano ya me contó que te dio dinero para el vestido y todo lo demás, ya te quiero ver arreglada mi vida, te quiero ver más hermosa de lo que eres.

Amy: Dame media hora y lo verás *sonriendo*

•Después de eso, beso su frente y corrió a su cuarto, se baño muy alegre con la idea de que su padre la vería hermosa, por un rato se olvido de todo el tema Shadow-Sally-Sonic y fue feliz después de mucho tiempo, su padre estaba ahí y nada más importaba. Salio de la ducha y se echo crema con escarcha por todo el cuerpo, nada mejor que brillar. Deslizo su vestido por sus piernas hacía arriba, luego los accesorios, algo de maquillaje, se lleno del perfume de Sonic y por alguna extraña razón no pensó en él en ese instante, luego se puso sus tacos, camino al espejo, un par de vueltas y ¡bum! Era hermosa y se sentía de ese modo. Salio de su habitación y corrió a la de sus padres. No pudo con lo que vio, lloro al instante, su padre estaba conectado a una maquina de oxigeno y agonizando, parecía estar en su lecho de muerte. Se acerco delicada a él y beso su frente. Lo levanto. Cuando abrió los ojos le pidió que diera una vuelta en frente de él y le explico todo…•

Padre: Amy, mi vida. Necesito que oigas esto y lo hagas muy bien. *En una voz apenas audible*

Amy: De acuerdo, solo dilo *llorando demasiado*

Padre: Será difícil de entender, pero, yo no me fui por negocios, yo estoy enfermo y se supone que con la operación que me realizaron, todo estaría bien y…

Amy: ¿Te operaron? *Llorando más fuerte*

Padre : Shhh shhh, tranquila mi niña. No quiero que tu madre suba, necesito que escuches. Sé que estos son mis últimos momentos y no quiero que sufras cuando me vaya. No sabes lo feliz que me hace verte hermosa y realizada, sé que extrañarás a este viejo de vez en cuando pero quiero que sepas que desde que te tuve en mis brazos, supe que serías mi razón de ser y de vivir, que no hay nada comparado con mi amor hacía ti. No quiero que llores *secando sus lágrimas* ya me toca irme, quiero que sepas que siempre te amaré y que recuerdes lo que te decía de niña: “Big girls don't cry” [Las niñas grandes, no lloran], quiero que siempre seas feliz y tengas esa hermosa sonrisa tuya en los labios, necesito que seas fuerte por mi y por ti.

Amy: Y por mi madre…

Padre: No, tu madre no es quién crees que es, Amy, cuídate de ella, *tosiendo* *empieza a cerrar los ojos* cuídate de ella… tu futuro está asegurado, cuando me vaya, solo llama al abogado.

Amy: ¿A qué te refieres con eso? Vamos, tú no puedes morir, ¡no puedes morir! *llorando*

Padre: Ya me toco, mi vida, tienes que aceptarlo, cuídate, ¿sí? Sigue hermosa y no dejes que nadie te haga daño, sé que estás sufriendo por algo, lo noto en tu rostro, solo necesito que lo resuelvas y seas feliz, no te pido nada más, que seas fuerte y feliz. Ya no tengo tiempo, te amo.

•En ese momento, su mano que estaba sujeta a la suya se aflojo, sus ojos se cerraron, su respiración se corto y su corazón paro de latir. Se acerco a él y susurro un: “Te amo más papá”, coloco su mano en su cuello y sintió que ya no tenía pulsaciones. Puteo, puteo y puteo, lloro como nunca, su padre ya no estaba a su lado y no era solo por un tiempo. Se había ido… para siempre. Bajo las escaleras corriendo y entro a la cocina gritando: “Mi padre se ha muerto, ¡se ha muerto!” mientras lloraba. Quería decírselo a su madre, pero ella estaba demasiado ocupada… besándose con el chofer. "¿Esto es una maldita novela mal escrita?" -Pensó- se acerco a su madre y le grito…•

Amy: ¡Sabías que mi padre estaba mal y no me dijiste! ¡Sabías que se iba a morir y en lugar de cuidarlo, estas aquí! ¡Dándote de besos con cualquier imbécil! ¡Eres una ramera! ¡Una maldita aprovechadora! *llorando*

Madre: *le tira una bofetada* ¡Sí! Sí sabía que tu padre moriría, ya era solo un viejo que estorbaba, ¿qué no te das cuenta? Ahora de una vez por todas, todo su dinero será mío y, ¿tu? ¡Tú te largas a un internado! ¿Sabes algo? Ahora que ese maldito viejo ya no está, te puedo decir la verdad. ¡Yo nunca te quise! Solo fuiste un gancho para no alejar a tu padre de mí. *se voltea y coge el teléfono*

•Mientras su madre marcaba unos números, su corazón se había roto, si su propia madre no la quería, ¿quién lo haría? El maldito chofer se largo a media discusión, si no… ya lo habría matado. Pensaba que su madre llamaría una ambulancia o alguien para que se lleven a su padre, pero no. Llamo al abogado para ver el testamento. Típico de una trepadora como ella. Lloro como una loca y llamo a su tío para darle la noticia. Después de 15 minutos llegaron él y el abogado, se abrazo del hermano de su padre y lloro en su hombro. Todo su maquillaje estaba estropeado y no tenía ganas de arreglarlo o preocuparse por eso. La persona encargada de leer el testamento, empezó con la lectura de los últimos deseos de su padre, para el asombro de todos, no le había dejado ni un solo centavo a su madre, ni el auto, ni la casa, ni las propiedades. NADA. Todo estaba a su nombre, bueno, por ahora al nombre de su tío ya que no era mayor de edad, pero él era una persona de confianza, sabía que nunca la estafaría y que le pondría todo a su nombre ni bien pudiera. Después de esto, su madre grito como loca y se puso a romper cosas. Pensó en su padre, como habrá sufrido cuando se entero que esa maldita arpía solo lo quería por dinero. Decidió seguir su consejo y ser fuerte…•

Amy: ¡LÁRGATE DE MI CASA! *Grito*

Madre: ¿Perdón? Esta es MI casa.

Amy: Que yo sepa, no está a tu nombre, ¡ahora agarra tus 4 trapos y lárgate! ¿No que no me quieres? ¿No que soy un estorbo? ¿Para qué vivir en casa de un estorbo? ¡Lárgate! ¡No te quiero ver! ¡No evitaste que mi padre se muera! ¡TE ODIO!

Madre: Eres una maldita desagradecida, ¡aparte de que yo te di la vida!

Amy: ¡Si! Pero también la hiciste mierda. *llorando* Ahora, ¡lárgate!

•En ese momento, su tío la abrazó y le dijo a su madre que se fuera de esa propiedad, que tenía media hora. Luego subió su rostro y le dijo que no se preocupara de nada, que él se encargaría de todo, de llevar a su padre, del velorio, de su madre… de todo. Le pidió que descanse, pero no tenía fuerzas. Necesitaba despejarse, pensar… Le dijo que iría a dar una vuelta a la manzana y volvería en unas horas. Él le dijo que probablemente ya se haya ido para cuando regrese y que si no quería quedarse en su casa, pero declino esa oferta. Todos los recuerdos con su padre están en esa casa y la última conversación que tuvieron estaba guardada entre las 4 paredes de la habitación. Él accedió y salio. Ya no quería ir al baile, no había pensado en eso siquiera, no le importó nada. Llego a un parque y se sentó a llorar. Justo en ese instante comenzó a llover. ¿Podía ser posible? Al parecer sí, las cosas iban de mal en peor, solo le faltaba enfermarse. Recuerdos de su padre viajaban por su mente sin la más mínima gota de consideración. Estaba sintiendo frío y tenía ganas de morir en ese instante. Encontrarse con su padre. Pero de pronto sintió que algo le cubrió la espalda, miro encima de sus hombros y era un terno. Se preocupo. Se paro y volteo a ver quién era. Estaba demasiado oscuro, no se podía ver bien, pero esa persona que repentinamente llego en uno de los momentos más tristes y críticos de su vida avanzó unos pasos hacia ella. Aún no podía ver quién era pero creía saberlo. Con una voz temblorosa, quebrada y llorando aún más, logro susurrar… •

Amy: ¿Sonic?…

CONTINUARA...